En la Escuela de Orientación Vocacional se aprende jugando
- Comunicación Institucional
Con cien fichas se incentivó la innovación estética y funcional de los aprendices al levantar una estructura.
La Escuela de Orientación Vocacional es un espacio en el cual los estudiantes de último año de educación media exploran las posibilidades temáticas que pueden abordar desde las diferentes carreras profesionales que la Universidad de Ibagué oferta.
Es así como los directores de los distintos programas académicos y sus docentes dan luces claras de los enfoques que los estudiantes pueden ejercer en el campo laboral desde sus disciplinas.
En este semestre B 2019 se destacó la herramienta pedagógica creada y utilizada por el programa de Arquitectura para esta actividad: un conjunto de piezas lúdicas que encajan y permiten a los jóvenes explorar el levantamiento de estructuras, teniendo en cuenta factores como las complejidades del terreno, los retos estéticos y la priorización de la funcionalidad.
Juan Felipe Solís, docente del Programa, se mostró satisfecho por la implementación de este recurso y los resultados. “El aprendizaje siempre debe tener un componente lúdico. Esta es una herramienta creada desde los talleres de la Universidad, específicamente en el laboratorio de Maker Space. En la Escuela de Orientación cada grupo contó con 100 piezas, que debían unir para construir estructuras altas, con el reto de levantar la más elevada y con la solidez de sostener un huevo en la cima” agregó.
Ver a los estudiantes enfrentar retos, aplicar nociones de física, integrar la funcionalidad con la estética y trabajar en grupo es un indicio positivo de lo que le espera al Departamento en términos arquitectónicos.
Conoce más de la actividad aquí.
Es así como los directores de los distintos programas académicos y sus docentes dan luces claras de los enfoques que los estudiantes pueden ejercer en el campo laboral desde sus disciplinas.
En este semestre B 2019 se destacó la herramienta pedagógica creada y utilizada por el programa de Arquitectura para esta actividad: un conjunto de piezas lúdicas que encajan y permiten a los jóvenes explorar el levantamiento de estructuras, teniendo en cuenta factores como las complejidades del terreno, los retos estéticos y la priorización de la funcionalidad.
Juan Felipe Solís, docente del Programa, se mostró satisfecho por la implementación de este recurso y los resultados. “El aprendizaje siempre debe tener un componente lúdico. Esta es una herramienta creada desde los talleres de la Universidad, específicamente en el laboratorio de Maker Space. En la Escuela de Orientación cada grupo contó con 100 piezas, que debían unir para construir estructuras altas, con el reto de levantar la más elevada y con la solidez de sostener un huevo en la cima” agregó.
Ver a los estudiantes enfrentar retos, aplicar nociones de física, integrar la funcionalidad con la estética y trabajar en grupo es un indicio positivo de lo que le espera al Departamento en términos arquitectónicos.
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